Lo que está en juego es la reconstrucción de un espacio público (cada vez más desierto en la actualidad) en el que los hombres y las mujeres puedan participar en una translación continúa entre lo individual y lo colectivo, entre los intereses, los derechos y los deberes de carácter privado y los de carácter comunal. (Bauman, 2006:166, citado en Úcar, 2007).
¿Qué relación tiene el TS con la ASC?, ¿en qué punto confluyen?
El Trabajo Social esta estrechamente relacionado con la Animación Sociocomunitaria, debido a que fundamentalmente el fin último es el mismo: focalizar la actuación social individual y colectiva para afrontar el malestar biopsicosocial en clave de proceso y de resiliencia, y poder así defender los Derechos Humanos y Sociales mediante el protagonismo y participación proactiva de las personas y comunidades y sus propias vivencias personales y colectivas, creando así sinergias orientadas a la movilización colectiva para creer y crear una sociedad (comunidad) más equitativa y justa socialmente hablando.
Por consiguiente, consideramos que el Trabajo Social Comunitario es el tipo de Trabajo Social que confluye con la ASC debido a que:
Cuenta con objeto de atención, escala y referentes disciplinarios propios, así como de un cuerpo teórico y metodológico característico, que lo distinguen de otras formas de trabajo social. La base territorial y la promoción de los vínculos comunitarios son sus pilares fundamentales. La comunidad se entiende aquí como el entramado de redes sociales existentes en un espacio geográfico determinado que suscita en sus miembros una identidad común (…) se propone impulsar las dinámicas sociales para fomentar la inclusión social. Conseguir ambas metas requiere implementar el empoderamiento tanto individual como colectivo (Gizarte 31, 2009, p.2).
Además, son dos principalmente los factores o conceptos de los que parte tanto el TS como la ASC, y son: la participación social como herramienta y la comunidad como medio y fin.
"La participación es otra forma de eliminar barreras y favorecer cauces para la misma no unívocos o únicos, sino a medida de las posibilidades reales de las personas. Cabría decir, que la participación es el punto neurálgico de un proceso; puesto que, mediante la correlación y la cooperación entre las diferentes personas, grupos, asociaciones, servicios, administraciones, etc. se logra la verdadera actuación e interacción en el mismo (...)Sin participación no hay proceso, no hay cambios reales o, mejor dicho, los cambios siempre serán el producto de las decisiones de otros y nosotros seremos simples receptores de las consecuencias de estas decisiones" (Marchioni, 2006, pp. 15-16).
Por lo tanto, participar significa poder tomar parte y decidir en, con y para la comunidad:
En la que la participación no se limita a poner en marcha determinadas medidas, sino que atraviesa todo el proceso, desde la planificación (previa) a la evaluación (continua y final). (…) hay que tener en cuenta que es la comunidad el agente más cualificado para realizar tal análisis, que adquiere así la categoría de autodiagnóstico. La participación también requiere tiempo y, por eso, los resultados de la intervención comunitaria sólo se materializan a medio y largo plazo. (Gizarte.31, 2009, p.3)
Por consiguiente, consideramos que el Trabajo Social Comunitario es el tipo de Trabajo Social que confluye con la ASC debido a que:
Cuenta con objeto de atención, escala y referentes disciplinarios propios, así como de un cuerpo teórico y metodológico característico, que lo distinguen de otras formas de trabajo social. La base territorial y la promoción de los vínculos comunitarios son sus pilares fundamentales. La comunidad se entiende aquí como el entramado de redes sociales existentes en un espacio geográfico determinado que suscita en sus miembros una identidad común (…) se propone impulsar las dinámicas sociales para fomentar la inclusión social. Conseguir ambas metas requiere implementar el empoderamiento tanto individual como colectivo (Gizarte 31, 2009, p.2).
Además, son dos principalmente los factores o conceptos de los que parte tanto el TS como la ASC, y son: la participación social como herramienta y la comunidad como medio y fin.
"La participación es otra forma de eliminar barreras y favorecer cauces para la misma no unívocos o únicos, sino a medida de las posibilidades reales de las personas. Cabría decir, que la participación es el punto neurálgico de un proceso; puesto que, mediante la correlación y la cooperación entre las diferentes personas, grupos, asociaciones, servicios, administraciones, etc. se logra la verdadera actuación e interacción en el mismo (...)Sin participación no hay proceso, no hay cambios reales o, mejor dicho, los cambios siempre serán el producto de las decisiones de otros y nosotros seremos simples receptores de las consecuencias de estas decisiones" (Marchioni, 2006, pp. 15-16).
Por lo tanto, participar significa poder tomar parte y decidir en, con y para la comunidad:
En la que la participación no se limita a poner en marcha determinadas medidas, sino que atraviesa todo el proceso, desde la planificación (previa) a la evaluación (continua y final). (…) hay que tener en cuenta que es la comunidad el agente más cualificado para realizar tal análisis, que adquiere así la categoría de autodiagnóstico. La participación también requiere tiempo y, por eso, los resultados de la intervención comunitaria sólo se materializan a medio y largo plazo. (Gizarte.31, 2009, p.3)
¿Es la participación social en el TS Comunitario y en la ASC una utopía?
¿Van a poder participar todas las personas? Esta puede que sea una de las preguntas más formuladas cuando decidimos hablar de participación social. Y en palabras de Marchioni:
Nunca participará todo el mundo, pero el proceso (y el trabajo comunitario) no excluirá a nadie de la posibilidad de participar y tendrá que tener capacidad para ir incorporando a las personas que van acercándose. Esto significa que el proceso es abierto (para poder incorporar) y flexible, para poderse adaptar a las condiciones reales de las personas y para qué estas puedan participar desde sus particularidades circunstancias (Marchoni, 2006, p. 27).
Nuestra intención es clara: romper moldes en lo que a ASC respecta. Defendemos un Trabajo Social transgresor que se repiense de manera constante para seguir en la senda de la transformación social sumando así, iniciativas de naturaleza participativa.
¿Van a poder participar todas las personas? Esta puede que sea una de las preguntas más formuladas cuando decidimos hablar de participación social. Y en palabras de Marchioni:
Nunca participará todo el mundo, pero el proceso (y el trabajo comunitario) no excluirá a nadie de la posibilidad de participar y tendrá que tener capacidad para ir incorporando a las personas que van acercándose. Esto significa que el proceso es abierto (para poder incorporar) y flexible, para poderse adaptar a las condiciones reales de las personas y para qué estas puedan participar desde sus particularidades circunstancias (Marchoni, 2006, p. 27).
Nuestra intención es clara: romper moldes en lo que a ASC respecta. Defendemos un Trabajo Social transgresor que se repiense de manera constante para seguir en la senda de la transformación social sumando así, iniciativas de naturaleza participativa.
Para concluir, quisiéremos dejar constancia de las principales funciones que consideramos que debería desempeñar el trabajo social o la trabajadora social, en el contexto de la ASC:
- Acompañar a la comunidad en su propio proceso de transformación.
- Promover el auto-empoderamiento de las personas con el fin de ser las propias protagonistas de su propia transformación individual y colectiva.
- Facilitar espacios de encuentro.
- Servir de apoyo técnico, en el caso de que lo requiera, a la comunidad.
- Intermediar, si fuese necesario, entre la comunidad y las instituciones-administración púbicas.
- Generar procesos de participación social, ofreciendo herramientas a la comunidad para que las propias personas desarrollen y potencien sus habilidades de auto-gestión y auto-organización.
- Supervisar los auto-diagnósticos y proyectos planificados y ejecutados por la propia comunidad, sirviendo de apoyo técnico.
Esperamos que la información compartida, haya despertado las ganas de seguir construyendo y reconstruyendo el Trabajo Social Comunitario y la ASC en particular, y el Trabajo Social en general.
- Acompañar a la comunidad en su propio proceso de transformación.
- Promover el auto-empoderamiento de las personas con el fin de ser las propias protagonistas de su propia transformación individual y colectiva.
- Facilitar espacios de encuentro.
- Servir de apoyo técnico, en el caso de que lo requiera, a la comunidad.
- Intermediar, si fuese necesario, entre la comunidad y las instituciones-administración púbicas.
- Generar procesos de participación social, ofreciendo herramientas a la comunidad para que las propias personas desarrollen y potencien sus habilidades de auto-gestión y auto-organización.
- Supervisar los auto-diagnósticos y proyectos planificados y ejecutados por la propia comunidad, sirviendo de apoyo técnico.
Esperamos que la información compartida, haya despertado las ganas de seguir construyendo y reconstruyendo el Trabajo Social Comunitario y la ASC en particular, y el Trabajo Social en general.
Referencias bibliográficas:
Marchioni, Marco. (2006). Comunidad,
participación y desarrollo: teoría y metodología de la intervención
comunitaria. Madrid: Editorial Popular.
SIIS, Centro de
Documentación y Estudios (24 de febrero del 2017). Dossier Trabajo Social
Comunitario, la eterna asignatura pendiente. Boletín Documental sobre Servicios
Sociales e Intervención. Gizarte nº31. Recuperado de: http://www.siis.net/documentos/gizarte/Numero31.pdf
Úcar Martínez, Xavier (2007). Factores clave de la participación en los espacios públicos.
Úcar Martínez, Xavier (2007). Factores clave de la participación en los espacios públicos.
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